Yo creo que a todos nos encanta la comida mexicana y uno de los platos favoritos de todos es la sopa azteca.
Lo que sucede cuando la comemos afuera es que generalmente está llena de calorías y pues si a eso le sumamos todo lo que comemos además de la sopita y bueno ni qué decirles…
Es por esto que les propongo hacer esta versión que está llena de sabor y modestia aparte les aseguro que es más rica que la de cualquier restaurante; acepto cualquier reto! El secreto de esta receta para bajar las calorías son las siguientes:
· Usamos caldo hecho en la casa, hecho por ejemplo de cuando cocinamos mano de piedra o cecina que dejamos en la refrigeradora para retirar toda la grasa.
· Las tortillas en lugar de hacerlas fritas las cocinamos en las rejillas que usaban nuestras abuelitas para calentar las tortillas; esto no solo le dan un saborcito ahumadito a la sopa si no que realmente no hace falta que estén fritas.
· El queso utilizamos mozzarella pero la versión light.
De esta manera solamente nos queda de grasita un gajito de aguacate y una cucharadita de natilla que podrían sustituir por yogurt natural 0% grasa que ponemos a escurrir en filtros de café pero bueno apuesto que estas dos cosas con medida no está tan mal.
Espero que les guste mi receta para la mejor y más liviana sopa azteca del universo!
LA MEJOR Y MAS LIVIANA SOPA AZTECA
Ingredientes:
3 tomates enormes o bien que pesen aproximadamente un kilo cortado en gajos
2 cebollas medianas cortada en cuartos
1 chile jalapeño fresco partido a la mitad y le quitamos las semillas
6 dientes de ajo pelados y enteros
1 taza de caldo de res desgrasado
4 tortillas
4 cucharaditas de natilla
Queso mozzarella light
½ aguacate
Preparación:
En una bandeja para hornear poner: tomates, cebolla y jalapeño con un poquito de aceite, sal y pimienta. Poner el horno en broil y colocar la bandeja en la parte más alta. Cocinar por unos minutos, cuando se vea que se comienza a suavizar incorporar los dientes de ajo y cocinar hasta que se comience a ver “quemadito”.
Sacar del horno y licuar; aproveche cualquier liquido que haya quedado en la bandeja. Colocar en una olla y agregar la taza de caldo y comenzar a hervir; esta sopa queda especita y con textura.
Tostar las tortillas en la rejilla hasta que estén tostadas.
En un plato poner una tortilla por persona y un puñito de queso. Agregar la sopa, una cucharadita de natilla y el gajito de aguacate.
Espero que les guste tantísimo como a mí!
Me fascina! me encanta la presentación final, la hace más apetitosa!
ResponderEliminarDeliciosa mi favorita. Gracias por invitarme a tu pagina esta demasiado buena y util!!!
ResponderEliminarMuchísimas gracias Edith, espero que la podás hacer pronto!
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